Tengo miedo de que vengan por mi cerebro, mis brains.
No es que soy muy especial, ni nada, solo que tienen un apetito feroz, y a ellos les gusta romper el cráneo y chupar el cerebro humano. Ni es una exquisitez - es su plato principal.
We are no longer the hunters, but the hunted.
Ahora pienso convertirme en vegetariano, ya que los entiendo más a los pobres animales que matamos para comer. Los pobres animales que comemos nosotros, ni se dan cuenta de que sus días están contados. Por lo menos, entiendo que vengan por mí.
Quizá... lo tienen mejor, porque no saben lo que va a venir y pueden vivir tranquilos. Yo no vivo tranquilo.
Lo más horroroso es que esos cabrones se parecen a nosotros.
En nadie se puede confiar, ni en los amigos, ni en tu hermano, ni en tu mamá. Los vi chupando el cerebro de la madre de mi mejor amigo, no quiero que lo hagan a mi mamá.
Mi mamá es una santa, la vi matar algunos de estos cabrones que vienen a comer a su propia gente. Los vi desde cerca. Chequeé de que ya no se levantarían nunca más, y que ella, la madre de Ricky, no se estaba convirtiendo también en una rabiosa zombie. Sus ojos son rojos, como si no duermen. Sus manos son grises, como si no se sienten el calor ni el frío. Sus cuerpos están deformados, y sus dientes... sus dientes... todavía con trozos del cerebro de la señora Guadalupe Flores...
Quiero pensar que lo invento.
Quiero volver a los días de Netflix an' chill.
Quiero estar tranquilo.
No puedo estar tranquilo...
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